Los que estamos en una relación a distancia, sabemos que mantenerla viva, no es tarea fácil.
A medida que pasa el tiempo, la comunicación va perdiendo su magia.
Y llega un punto en que la frustración se transforma en una emoción común para ambos.
Pero aunque no lo creas, hay formas de enamorar nuevamente no solo a tu pareja, sino a la idea de seguir juntos a la distancia.
Aquí comparto 7 ideas que te ayudarán a que ambos vuelvan a creer en la relación. ¿Te quedas?
1) Sigan conociéndose
La monotonía de la comunicación a distancia, hace que a veces comentemos sobre los mismos temas una y otra vez.
Es decir, sin querer, se crea una rutina de conversación, ¿lo has notado?
Esto tiene una solución sencilla, solo requiere de ganas. ¿Cómo hacerlo?
Habla con tu pareja de verdad. No te centres solamente en “¿qué has hecho hoy?”
Existen muchos temas originales para hablar con tu pareja y salir de la rutina.
Comparte tus miedos, tus sueños, tus logros y tus fracasos.
Pero también escucha.
La comunicación no es un camino de una sola dirección. Asegúrate de que tu pareja también se sienta escuchada y comprendida.
No tengas miedo de hablar de tus sentimientos. Si sientes que el amor se está desvaneciendo, exprésalo.
Puede que sea una conversación difícil, pero es necesaria.
La honestidad puede doler en el corto plazo, pero a la larga, fortalece la relación.
Recuerda que la comunicación es mucho más que hablar de problemas.
También es compartir risas, emociones y seguir conociéndose el uno al otro.
2) Mantén un poco de misterio
La necesidad de estar con alguien que amas, a veces hace que compartas absolutamente todo.
Pero no es necesario que le menciones cada minuto de tu vida a tu pareja.
El exceso de información puede llevar a la saturación o al aburrimiento.
Mantén un poco de misterio en tu relación para mantener viva la chispa.
No reveles cada pequeño detalle de tu día a día.
Deja que tu pareja se pregunte qué estás haciendo, qué estás pensando, cómo te veías hoy.
Permite que su imaginación haga parte del trabajo y que la curiosidad alimente el deseo.
También, sorprende a tu pareja de vez en cuando.
Planifica una visita sorpresa o envía un regalo inesperado.
Recuerda que toda relación necesita un equilibrio entre compartir y mantener cierta dosis de misterio.
Esto no significa ocultar cosas importantes o ser deshonesto, sino dejar espacio para la imaginación y la sorpresa.
3) Tengan metas juntos
Tener algo que esperar juntos puede ser un gran motivador en una relación a distancia.
Las metas compartidas hacen sentir que ambos están remando en la misma dirección.
Puede ser algo tan simple como planificar su próxima visita o algo más grande como decidir cuándo y cómo cerrarán la brecha de distancia.
O quizás sea una meta no relacionada con la distancia, como leer el mismo libro y discutirlo juntos.
Poner metas y trabajar hacia ellas crea una dinámica de equipo y da una sensación de logro conjunto.
Eso sí, te aconsejo que las metas sean realistas y acordadas por ambos.
No querrás agregar estrés innecesario a tu relación poniendo expectativas que son demasiado altas.
4) Apoyo mutuo
En una relación a distancia, no puedes estar físicamente al lado de tu pareja para consolarla cuando está triste o celebrar con ella cuando está feliz.
Sin embargo, eso no significa que no puedas dar apoyo emocional.
¿De qué se trata?
Pues de estar ahí para tu pareja, de mostrar empatía y comprensión, de ofrecer palabras de aliento cuando las cosas se ponen difíciles.
Se trata de reír juntos durante los buenos tiempos y de sostenerse mutuamente durante los malos.
Se trata de validar los sentimientos de tu pareja y de asegurarle que no está sola, incluso cuando estás lejos.
¿Cómo hacerlo?
Dar apoyo emocional puede ser tan simple como enviar un mensaje de texto preguntando cómo fue su día o tan profundo como hablar durante horas sobre un problema o preocupación.
Puede ser recordarle a tu pareja cuánto la amas y cuánto te importa, sobre todo en esos días en que la distancia parece insoportable.
A veces, cuesta darnos cuenta que, a pesar de hablar con nuestra pareja a diario, nuestra pareja no se siente contenida por nosotros.
Presta atención a este tema, y verás cómo pueden comenzar a revertirse las cosas entre ustedes.
5) Conoce a tu pareja al estar juntos
Lo sabemos: las relaciones a distancia implican soledad.
Pero ¿qué pasa en aquellos pocos momentos en los que están juntos físicamente?
Sí, hacer todo juntos se transforma en una prioridad, pero ¿has frecuentado los lugares que tu pareja suele visitar cuando no estás?
¿Conoces a su familia o amigos? ¿Sabes dónde trabaja?
Implicarte más y querer saber de tu pareja cuando están juntos, mejora el vínculo y, además, entenderás mucho mejor sobre todo lo que te cuente tu pareja al volver a estar a la distancia.
¿Por qué?
Porque has conocido esos lugares o personas que siempre te menciona, y eso te dará oportunidad de enriquecer la conversación.
Además, al querer conocer mejor cómo es su vida donde vive, le estarás demostrando que quieres formar parte de ella, y te interesa.
6) Vive tu vida
Las relaciones a distancia pueden llevar a la tentación de poner tu vida en espera, de vivir en función de las videollamadas, de los mensajes y de las visitas programadas.
Pero debes recordar que también tienes una vida propia.
¿Estás manteniendo tus propias amistades y relaciones familiares?
¿Estás dedicándole tiempo a tus intereses?
¿Estás creciendo personal y profesionalmente? Estas son preguntas importantes que debes hacerte.
Al concentrarte en construir una vida por tu cuenta, no solo previenes la dependencia emocional, sino que también te conviertes en una persona más interesante para tu pareja.
Tienes más experiencias, ideas y emociones para compartir, lo que puede mejorar tus conversaciones y fortalecer tu conexión.
Además, tener una vida propia puede ayudarte a lidiar mejor con la soledad.
Cuando estás ocupado persiguiendo tus propios objetivos y disfrutando de tu vida, la ausencia de tu pareja se vuelve menos abrumadora.
7) Comparte tiempo a la distancia
No, no hablo de conversar, hablo de hacer cosas juntos.
Y aunque la distancia puede hacerlo difícil, eso no significa que no puedas hacerlo.
En mi propia relación a distancia, encontramos maneras creativas de mantener viva la intimidad.
Por ejemplo, a veces organizamos cenas virtuales donde ambos cocinamos el mismo plato y luego nos sentamos a comer juntos a través de una videollamada.
Aunque no podemos saborear la comida del otro ni estar físicamente juntos, estas cenas nos ayudan a sentirnos conectados y cercanos.
Otra forma de mantener viva la intimidad es asistir a eventos virtuales juntos, o clases de algo que quieran aprender.
La lista es larga, solo necesitas un poco de inspiración.
Una relación a distancia puede ser un desafío, pero con esfuerzo y ganas, puedes mantener el interés que ambos necesitan para seguir apostando a la pareja.
Prueba estas ideas. ¡De seguro te ayudarán!
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